Ir al contenido principal

Entradas

Rafael Alberti. Una lectura

Entradas recientes

Rafael Alberti. "Roma, peligro para caminantes.

Lo que dejé por ti Ah! Cchi non vede sta parte de monno Nun za nnemmanco pe ecche ccosa è nnato (G. G. Belli) Dejé por ti mis bosques, mi perdida Arboleda, mis perros desvelados, Mis capitales años desterrados Hasta casi el invierno de la vida. Dejé un temblor, dejé una sacudida, Un resplandor de fuegos no apagados, Dejé mi sombra en los desesperados Ojos sangrantes de la despedida. Dejé palomas tristes junto a un río, Caballos sobre el sol de las arenas, Dejé de oler la mar, dejé de verte. Dejé por ti todo lo que era mío. Dame tú, Roma, a cambio de mis penas, Tanto como dejé para tenerte.

Fori imperiali. Los foros imperiales

Al final del período republicano, cuando Roma ya se había convertido en la capital de un enorme Imperio que se extendía desde la Galia hasta el Asia Menor, el antiguo  Foro romano  ya no era suficiente para desempeñar su papel de centro administrativo y monumental de la ciudad. Así pues, Julio César empezó a construir una nueva plaza en el año 54 a.C., que inicialmente fue considerada como una simple ampliación del Foro republicano original. Más adelante, al  Foro de César  le siguieron el  Foro de Augusto , el Foro Transitorio (construido por Domiciano pero inaugurado por Nerva) y, por último, el  Foro de Trajano , el más grandioso de todos ellos. Desde el punto de vista urbanístico el conjunto de estas áreas arqueológicas constituyen un conjunto orgánico que se extiende desde el Capitolio hasta el Quirinal y que fue bautizado en épocas más recientes como “ Foros Imperiales ”. Entre los años 1924 y 1932 los Foros Imperiales fueron desenterrados gracia...

Campidoglio. Capitolio

A pesar de ser la más baja y la menor de las  siete colinas  que circundaban Roma (Aventino, Capitolio, Celio, Esquilino, Palatino, Quirinal, Viminal), la colina del  Capitolio  es, probablemente, la que esté más relacionada con las vicisitudes históricas de la ciudad, ya que desde la antigüedad fue el eje central de la actividad política y religiosa de Roma. Hoy en día, la plaza ideada por Miguel Ángel, a la que se accede subiendo por una espléndida escalinata llamada “Cordonata” alberga, además del Palacio de los Senadores (sede del Ayuntamiento de Roma y de su Alcalde), otros dos edificios gemelos (el Palacio de los Conservadores y el Palacio Nuevo), sede de los espléndidos  Museos Capitolinos . Dos curiosas leyendas están relacionadas con esta colina: La Roca Tarpea y Las Ocas del Capitolio. La leyenda narra que en la época de la fundación de Roma, la colina fue conquistada por los “Sabinos” gracias a la traición de la romana Tarpea, quien habría abiert...